[31 mayo] Seminario doctoral

Seminario Diálogos interdisciplinarios

Seminario Diálogos Interdisciplinarios

Presentación 1: La colonización agrícola de las Antillas y de la Nueva España en el siglo XVI: representaciones, prácticas y consecuencias.

La conquista de varios territorios de las Américas por los españoles inició un proceso descrito por el historiador estadounidense A. Crosby como el “intercambio colombino”, a saber: la circulación de plantas y animales entre ambos lados del Atlántico después de las expediciones colombinas. Dentro de una historiografía ya densa, esta ponencia presentará una investigación doctoral en curso intentando relacionar la historia medioambiental con la historia social y la historia cultural. La hipótesis principal es que las plantas europeas estaban estrechamente vinculadas con la conquista española: en todos los lugares donde se asentaron, los españoles intentaron poner sus plantas e instaurar heredades similares a las de Castilla. Varias razones pueden explicar el anhelo español para la transferencia en sus dominios americanos de un grupo homogéneo de plantas, descritas como “plantas de Castilla” en las fuentes. Además de estar consideradas como medios imprescindibles para la “perpetuación” de la presencia española, tenían un fuerte valor religioso, explicando el papel de los misioneros en su difusión.

Aquellas representaciones culturales estaban vinculadas con prácticas concretas. Para llevar las plantas de Castilla, los españoles tuvieron que inventar nuevas técnicas para asegurar la transferencia de las plantas de un lado a otro del Atlántico, un desafío sin precedente en la historia de la navegación. A pesar de todas las dificultades y de costos consecuentes, los españoles pusieron muchos esfuerzos en esas circulaciones, mostrando la importancia que acordaban a las plantas de Castilla.

La llegada rápida de tales plantas provocó cambios fundamentales en las Américas. Cambiando la naturaleza, transformando los paisajes, las plantas traídas participaron también en la construcción de la sociedad colonial novohispana, a través de las actividades agropecuarias desarrolladas por los colonos. De hecho, las plantas de Castilla estuvieron en el centro de las relaciones entre españoles e indígenas, tanto en el punto de las relaciones cotidianas y interpersonales, como de la construcción de las nuevas identidades jurídicas de las comunidades indígenas después de la conquista. Entre relaciones forzosas y re-apropriaciones oportunistas, las plantas de Castilla expresan toda la ambigüedad de la nueva sociedad novohispana. En resumen, el proyecto doctoral quiere mostrar como la sociedad colonial novohispana se construyó en parte por estas plantas, estudiando procesos ya conocidos con nuevo punto de vista.


Comenta: Arnaud Exbalin (U. Paris Nanterre, Mondes américains ESNA-EHESS)
Presenta: Antoine Duranton (EHESS, centre de recherches historiques (CRH)- groupe d’études ibériques (GEI))

Presentación 2: La cuestión de la identidad cultural en el giro decolonial latinoamericano

En Francia, el contexto editorial es cada vez más favorable a la difusión de las ideas del giro decolonial latinoamericano. Sin embargo, desde su aparición en el ámbito francés, y a fortiori desde 2019 y la polémica del islamo-izquierdismo, su recepción se produce en el marco de debates políticos y académicos, en cuyo centro se encuentra la idea de que participarían en una esencialización de las identidades culturales, amenazando así con producir análisis erróneos en el plano científico y fragmentar la sociedad en el plano político.

En primer lugar, esbozaremos los entresijos del giro decolonial. Este movimiento de ideas se formó en la década de los 1990 en América Latina y se institucionalizó mediante la constitución del grupo Modernidad/Colonialidad en la década de los 2000. Su aparición debe entenderse a la luz de dos elementos: el contexto político en el que aparece y el poscolonialismo, del que pretende distinguirse. En efecto, emerge tras dos décadas de políticas neoliberales cuando se han fortalecido las izquierdas latinoamericanas y se han revitalizado los movimientos sociales, a lo que se añade un clima de oposición general a los modelos sociales, económicos y políticos occidentales. Además, cabe tomar en cuenta las numerosas diferencias que separan las corrientes poscolonial y decolonial. Esta última ambiciona ser una radicalización de la crítica al eurocentrismo ya formulada por los estudios poscoloniales. Además de las diferencias de objeto, de período histórico, de corpus y de filiación teórica, existe también una voluntad de ir más allá, formulada por ciertos autores como una crítica eurocéntrica del eurocentrismo.

En la segunda parte de esta presentación, intentaremos mostrar que el discurso sobre la identidad cultural, que es uno de los resortes argumentativos del giro decolonial, se basa en la tradición del latinoamericanismo, iniciada a mediados del siglo XIX y continuada a lo largo del siglo XX. Tomaremos como ejemplo el pensamiento del filósofo argentino-mexicano Enrique Dussel, pensador del diálogo intercultural y de la alteridad, así como uno de los primeros en criticar la narrativa de la modernidad occidental. Esta línea crítica se convertirá en una de las tesis principales del movimiento: la modernidad es estructuralmente colonial. Por último, trataremos de las dificultades actuales de esta investigación doctoral, evocando el cuestionamiento de la legitimidad que tiene el/la investigador·a europeo·a a trabajar sobre estos temas, así como sobre las cuestiones metodológicas relativas a la filosofía de campo.


Comenta: Gabriel Martínez (Posgrado en Estudios Latinoamericanos (PPLE), Facultad de Filosofía y Letras, UNAM)
Presenta: Lola Yon-Dominguez (doctorante, EHESS, CEMS (Centre d’études des mouvements sociaux)

Miércoles 31 mayo | 10:30-12:30 h

CEMCA – Río Nazas #43, Cuauhtémoc, 06500, CDMX. Salón 21. ENTRADA LIBRE.

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