La era en la que vivimos se caracteriza por una serie de importantes cambios ecológicos, que se acompaña de importantes cambios sociales y políticos, que afectan de manera desigual a los territorios. La alimentación es una de las prácticas diarias que, ante estos cambios, genera la mayor cantidad de dudas y preguntas. Sin embargo, como es una práctica cotidiana, la alimentación también es una herramienta poderosa para generar cambios duraderos, con un fuerte impacto en relación con los problemas planteados.
En este sentido, los niños y jóvenes, estas «generaciones futuras», juegan un papel cada vez más importante. Por un lado, la adolescencia parece ser un período clave de definición y autoafirmación en relación con adultos y compañeros, un período en el que se adquieren nuevos hábitos, que también son importantes para el equilibrio alimentario y crecimiento futuro A menudo, las prácticas de alimentación de los adolescentes se resumen en el término «comida chatarra». Sin embargo, se basan en una multitud de factores, aún poco estudiados, que revelan que las nuevas prioridades también incluyen criterios sociales y ambientales.
Por otra parte, los jóvenes sienten y tienen la responsabilidad de proteger los ecosistemas en los que crecen. Las marchas climáticas que marcaron los años 2018 y 2019 encontraron un eco rotundo entre los jóvenes. A través de sus prácticas y sus implicaciones políticas, los jóvenes se convierten en agentes de cambio.
De manera innovadora, el objetivo científico del día es pensar en la relación entre las transiciones experimentadas durante la adolescencia y las transiciones sociales y ambientales de la era Antropoceno. ¿Cómo la transición de la infancia a la edad adulta –que también constituye un período de transición alimentaria–, representa un potencial para responder a las transiciones ambientales, sociales y políticas asociadas con el cambio global?
El programa del día tiene lugar en tres etapas. Un primer paso se dedicará a la definición de la adolescencia como una era de la transición alimentaria, tomando el caso de México. Un segundo paso, se centrará en el entorno alimentario en el que viven los adolescentes, como uno de los factores que explican sus prácticas. Una tercera parte, presentará las oportunidades que representa la adolescencia para desplegar proyectos territoriales frente a la aceleración del cambio. Será una oportunidad para escuchar experiencias concretas en torno a la educación agrícola y alimentaria, iniciativas en el área de la gobernanza alimentaria para los más jóvenes y dispositivos de distribución escolar de alimentos.
Este día sigue los mismos argumentos que el día organizado el 15 de octubre de 2019 en Buenos Aires, con el fin de comparar un contexto latinoamericano con otro.
28 de enero 2020 | 9:30 – 15:00 h
Instituto de Investigaciones Sociales (UNAM)– Circuito Mario de la Cueva s/n, Ciudad Universitaria, 04510, CDMX.
Ver programa
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.